Tuesday, December 07, 2010

Tutu and his light

Reaching the age of 11 in Kasongo is not easy. Malaria, the lack of food, of doctors, of transport, of light…. The filthy life conditions prevent many children from reaching adulthood.

But if the one that wants to reach it is albino, the task turns out even more arduous.

Not only are they more prone to eye problems, blindness and skin cancer. They are also killed as their body parts are considered precious witchcraft articles. Even their graves are dug out to turn their extinct hands and feet, into macabre trophies.

Tutu was a survivor.

He came to me one sunny day, while I walked in the red paths of Kasongo.

His eyes were sunk and his gaze lost. His hair was dirty of a white and reddish colour. His skin was dusty, singed, crumpled like the skin of an old man.

Full of shyness, he asked me for money.

I told him that if I gave him money, I would need to give money to all the other kids of Kasongo.

- It is to buy a pair of sunglasses and prevent me from becoming blind.

- How much are they?

- 1 $ (1000 Francs)

I took two dirty bills of 500 Francs and gave them to him.

- But I want you to come back and show me your glasses, ok?

He left like a lighting and came back like a lightning after 30 minutes, with a huge pair of sunglasses and an even bigger smile on his face.

Since that day he waited in front of the house after lunch, day after day. And he did not say a word to me, but smiled to me, and I smiled to him.

The soul polisher

-I am the official shoe polisher of Kasongo, may I? I looked down to my battered buddies that had shared with me adventures and gambles for 6 years.

- But these are flip flops – I said

- Well, can I come tomorrow then?

He only had black paint in the little wooden box and the clearest gaze I had ever seen, full of illusion.

- I am the official shoe polisher of Kasongo, may I?

- I looked down to my white running shoes.

-But they are while…

- Ok then, can I come tomorrow?

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- I am the official shoe polisher of Kasongo, may I?

- But today it has rained so much, the roads are muddy and if you clean my shoes they will become dirty again …

- He looked down, with a sad and lonely face. Then, suddenly he looked up with those eyes of honey and said full of enthusiasm:

- If they get dirty today, I will come back tomorrow and clean them again. May I?

- In that case…- I said melted – What is your name?

- My name is Nasser, it means the ‘Triumphant’, and I am the official shoe polisher of Kasongo. I am 11 years old and with the money I get from polishing shoes I help my mother pay my school, may I?

And with his little hands of ebony, he took my ankle with tenderness, and started to dust off my shoes, and my soul.

Sunday, December 05, 2010

La sonrisa del alba

Llegar a cumplir 11 años en Kasongo no es fácil. La malaria, la falta de alimentos, de médicos, de transporte, las condiciones inmundas de vida hacen que muchos no lo consigan. Pero si el que los quiere cumplir es albino, la tarea se complica.

No sólo son proclives a los problemas de visión, a la ceguera y al cáncer de piel. Además corren peligro de muerte al ser consideradas sus extremidades, artículos de brujería. Hasta sus tumbas se saquean para conseguir una mano o un pie.

Tutu era un superviviente.
Se me acercó un buen día mientras paseaba por los caminos rojos de Kasongo, en Congo.
Tenía los ojos hundidos y la mirada baja. El pelo sucio, de un blanco rojizo. La piel polvorienta, chamuscada, arrugada, como la de un viejo.

Con suma timidez, me pidió dinero.
Le dije que si le daba dinero a él se lo tendría que dar a todos los demás niños del pueblo.
'Es para comprarme unas gafas de sol y no quedarme ciego'.
'Cuánto valen?'
'1000 Francos' (1$)
Saqué dos mugrientos billetes de 500 francos del bolso y se los dí. 'Pero quiero que me vengas a ver y me enseñes las gafas que te has comprado, vale?'
Se fue como un relámpago. Y como un relámpago volvió al cabo de unos 30 minutos, con unas gafas negras enormes y una sonrisa aún más grande. Y desde entonces, después de comer, venía a verme todos los días. Y no decía nada, pero sonreía. Y yo le sonreía a él.

El limpiador de almas

‘Soy el limpiabotas oficial de Kasongo, ¿puedo?’. Miré hacia abajo, a mis maltrechas compañeras de andanzas y aventuras desde hacía 6 años.

‘Pero si son chanclas’ – Le dije.

‘Vale, ¿puedo entonces venir mañana?’

Sólo tenía un bote de pintura negra y un cepillito desgreñado en la cajita de madera. La mirada más nítida y llena de ilusión que jamás hubiera visto.

'Soy el limpiabotas oficial de Kasongo, ¿puedo?'. Miré hacia abajo y vi mis zapatos blancos con los que corría por las mañanas.

‘Pero si son blancas’ – comenté con una media sonrisa apenada.

‘Vale, ¿puedo entonces venir mañana?

‘Soy el limpiabotas oficial de Kasongo, ¿puedo?'

‘Pero si hoy ha llovido y está el camino lleno de barro, se me van a manchar en cuanto los limpies’.

Miró hacia abajo entristecido por un momento, y en seguida irguió su mirada dulce y me dijo:

‘Si se te manchan hoy volveré mañana otra vez a limpiártelos’.

Bueno – le dije derretida - ¿Cómo te llamas?

‘Me llamo Nasser, significa el victorioso, y soy el limpiabotas oficial de Kasongo. Tengo 11 años y con el dinero que saco de limpiar zapatos puedo ayudar a mi madre a pagar mi escuela, ¿puedo?’

Y sin más, con sus manitas negras, y su sonrisa de ángel tomó mi tobillo con ternura y comenzó a quitarle el polvo a mis zapatos…. y a mi alma.

Controladores de aire y lágrimas

Que levante la mano quien quiera un trabajo en el la hora se paga a 134 Euros y al ano pague de media 200.000 Euros. Que levante la otra mano quién quiera un trabajo de 30 horas a la semana.
Pues ahora que tienen las manos levantadas, suban y bajen los brazos una y otra vez con toda la energía que puedan e intenten volar, por que esta es la única forma de hacerlo en este país.

Sólo son pocos más de 2.000, los privilegiados que controlan el aire que respira Espana. 2.000 inconscientes, ilógicos, egoístas e insolidarios.

Inconscientes por que si hubieran sido conscientes de lo que hacían, les llamaría criminales, zopencos o gentuza. Inconscientes por que han echado por tierra las ilusiones de 650.000 inocentes, de sus madres, padres, hijos, hijas, amigos, novios, amantes, colegas de trabajo, etc que les esperaban con los brazos abiertos. Incoscientes por que han parado un país de parados, por que su caprichoso refunfuno nos va a costar a todos, por que cada segundo que ellos se han declarado 'enfermos' han echo enfermar más a los viajeros y a la maltrecha economía espanola.

Ilógicos por que lo que han hecho no es justicia ni tiene ninguna lógica. Las huelgas se hacen para llamar la atención de los medios de comunicación y el público y de los gobernantes a la larga. Para conseguir cambiar algo por medio de presión. Esto no ha sido una huelga. Esto ha sido una soberana estupidez, un chantaje en toda regla que no obedece a la razón, pues jodiendo a tantos por la extravagancia de unos pocos solo ha conseguido ponernos a todos en su contra, gobierno incluído.

Insolidarios por armar semejante caos y alarma para trabajar menos por más en un país en el que los que tienen suerte trabajan más por menos.

Egoístas por que son los que menos trabajan y más ganan de toda Europa y ganan el doble que la media Europea.

Cuando perdieron el control del aire ganaron el control de las lágrimas, ilusiones y suenos de todos los que querían volar. Perdieron la cabeza y el corazón.

Sigue usted con las manos levantadas? Pues cierre todos los dedos de las manos menos el corazón, y muéstreselos a ellos - sin miedo -, que precisamente eso, es lo que les hace falta.